Nuestra visión y filosofía
“QUIERO TIEMPO, PERO TIEMPO NO APURADO,
TIEMPO DE JUGAR QUE ES EL MEJOR.
POR FAVOR ME LO DAN SUELTO
Y NO ENJAULADO ADENTRO DE UN DESPERTADOR”
María Elena Walsh
La primera infancia, período que abarca desde la concepción hasta los 6 años de vida, es una etapa crucial en el desarrollo vital del ser humano.
Es en esta etapa donde se asientan las bases para las funciones cerebrales superiores, como el lenguaje, el razonamiento lógico, la memoria, la percepción espacial y visual, entre otras.
Es la etapa en la que se comienzan a desarrollar todas las capacidades tanto físicas, como cognitivas y emocionales.
Las experiencias que se vivan en esta etapa de la vida, son cruciales para un desarrollo armónico y sano en todos los aspectos.
En pocos años los niños y niñas tendrán que aprender muchas cosas: caminar, escuchar, hablar, interpretar el mundo que los rodea, entender lo que les sucede, separase de la familia, vincularse con otros, y tantas cosas más.
Acompañarlos en este proceso de crecimiento y descubrimiento requiere de parte del adulto presencia, paciencia, amor, firmeza y empatía.
El mundo de hoy con su ritmo acelerado, en el que el tiempo apremia y en el que se despliegan un sinnúmero de propuestas y actividades muy atractivas, novedosas y con promesas ilusorias a futuro, hace que perdamos la mira, de lo que realmente los niños y niñas preescolares necesitan.
Muchas veces se los somete a múltiples y variadas actividades, algunas si muy atractivas, otras por el contrario muy repetitivas como los famosos libros de actividades, con una agenda llena y sin respiro, creyendo que de lo contrario no tendrán la formación adecuada para las exigencias escolares.
Las relaciones interpersonales son el eje central del desarrollo infantil, el vínculo con el otro, nunca podrá ser sustituido y / o reemplazado por actividad por maravillosa que esta sea.
Un niño que se siente querido, seguro, confiado y por sobre todas las cosas escuchado, se sentirá bien consigo mismo, lo cual incidirá positivamente en su posterior rendimiento académico, pero para lograr esto se necesita antes que nada respetar sus necesidades y acompañarlo en este proceso sin apurar etapas, sino por el contrario dándole el tiempo que necesita.
Autores de la talla de Piaget, Vygotsky y Winnicott entre otros, han explicitado la manera en que el juego afecta a todos los procesos del desarrollo infantil, el juego es la vía para elaborar y expresar sus sentimientos y un hecho clave para desarrollar todo tipo de competencias intelectuales, sociales y morales.
Es por ello que todas las actividades en Candilejas, son elegidas cuidadosamente y presentadas en forma paulatina según el nivel de desarrollo de cada franja etaria.
El niño en Candilejas se embarca en una aventura que lleva 5 años, tiempo en el que está listo para egresar con herramientas suficientes para vivir una escolaridad exitosa.
Año a año las actividades le van aportando valor y ayudando a crecer desde adentro hacia afuera.
Según un informe realizado por la Unesco en el que participaron todas las grandes eminencias del mundo dedicadas a la educación llegaron a la conclusión que la educación del siglo XXI debería basarse en 4 pilares fundamentales a saber: » aprender a aprender » «aprender a hacer» «aprender a ser» y «aprender a convivir»
Es nuestro gran objetivo que el niño y la niña que egresen con 6 años o próximos a cumplir esa edad tenga: deseos y ganas de seguir aprendiendo, se sienta seguro y confiado, que frente a distintos problemas que se le presenten busque distintas alternativas, que sea empático y solidario, responsable de sus actos y fiel a lo que siente.
En el transcurso de tantos años, hemos acompañado a muchísimas personitas en este andar de Candilejas de quienes nos sentimos muy orgullosos porque son niños que se han destacado como hermosas personas, llenitas de valores que los han hecho sobresalir en sus diferentes grupos sociales.
Todos los años nos hacen saber que aquí o allá hay niños que vinieron a Candilejas que son elegidos abanderados y no solo por su nivel académico, sino por algo más importante que es lo que los destaca por lo lindas personas mostraron ser.
Con gran orgullo podemos decir que llevan en algún lugarcito de su alma, el sello de Candilejas.
El tiempo de ser niños y disfrutar de ello, es ahora, no los privemos de ese placer y ese derecho.